El Valle de Piedras Encimadas se encuentra a 25 kilómetros de Zacatlán, en el Estado de Puebla, ofreciendo un espectáculo imponente en donde la gravedad se ve desafiada por la misma naturaleza.
En el Valle de Piedras Encimadas,
gigantescas formaciones rocosas en posiciones caprichosas e
inexplicables, cuyo equilibrio resulta casi incomprensible, hacen del Valle de Piedras Encimadas,
un lugar místico y mágico por su bello paisaje, adornado por enormes
piedras que están superpuestas con formas de caballos, duendes, ranas,
lagartos, humanas, etc. dependiendo de la imaginación de cada
observador.
En el Valle de Piedras Encimadas,
lo único que se escucha, es el canto del viento al pasar por las rocas y
los árboles o las ovejas que de vez en cuando suelen pasar con su
pastor.
Cuenta la leyenda del Valle de Piedras Encimadas,
que las rocas son gigantes cuya maldad fue castigada por un dios
prehispánico que los convirtió en piedras. Leyendas aparte, el tallado y
creación de estas formaciones petreas, se atribuyen a la erosión de
piedras calizas de remoto origen marino y que han requerido de milenios
de los efectos del viento y la lluvia. Se calcula que estas formaciones
rocosas tienen unos 65 millones de años.
En el Valle de Piedras Encimadas
podrás disfrutar plenamente de la naturaleza, montar a caballo y
recorrer las 300 hectáreas, también podrás realizar senderismo y
compartir con tu familia y/o amigos un hermoso día.
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