Los Prismas Basálticos son monumentales columnas de más de 40 metros de altura de forma geométrica, singular belleza, únicas en México. El basalto prismático se deriva del afloramiento de roca ígnea.
Los Prismas Basálticos
consisten en la formación de enormes columnas geométricas que se aforan
en los lados y fondo de un cañón o barranca llamada Alcholoya. Aquí se
vierten las aguas provenientes de los manantiales de la Ex Hacienda de
San Miguel Regla y de la presa San Antonio para formar diversas
cascadas.
El origen de los Prismas Basálticos
se remonta al enfriamiento acelerado de lava durante un derrame hace
millones de años, que se esparció en lo más hondo de dicha barranca. Las
columnas de los Prismas basálticos miden entre 80
centímetros de diámetro y varios metros de altura, están acomodadas de
manera vertical, de cinco o seis caras, perfectamente definidas las
uniones entre sí, y resalta su bicolor gris-negro.
Es un “capricho” geológico que brinda un espectáculo de la magia geofísica de la naturaleza. Los Prismas basálticos
hacen pensar que fueron esculpidas con respaldo del hombre. El barón
Alexander Von Humbolt catalogado como el padre de la geografía moderna,
visitó México a principios del siglo XIX. Impresionado por la belleza de estos Prismas basálticos, realizó dibujos de esta formación en 1803. Hoy se exhiben en el Museo de Arte Británico en Londres.
Existe una formación parecida a los Prismas Basálticos
en la costa noreste de Irlanda del Norte. Es la “Calzada de los
Gigantes”, integrada por enormes columnas de piedra que caen al mar.
Los Prismas Basálticos
aún no está catalogada como Área Natural Protegida, sin embargo, por sus
características pertenece a la categoría de Monumento nacional.
Además de visitar y admirar estos Prismas Basálticos,
puedes realizar en las zonas aledañas, paseos a caballo, caminatas,
excursiones, remar y pescar. Te recomendamos visitar el Parque Nacional
El Chico, la presa de San Antonio y la Ex Hacienda del Conde Regla.
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