Llega el verano y las vacaciones,
se organizan los respectivos descansos ya sea en la playa, montañas,
desiertos, selvas, zonas arqueológicas, balnearios, parques
ecoturísticos, etc. La mayoría de las veces el bloqueador o protector solar suele quedarse en casa o bien en las farmacias por sus altos costos en verano; y en esta estación del año, las emisiones radiantes provenientes del Sol tienen un mayor impacto sobre cualquier tipo de piel.
Los efectos de los rayos UVA en la piel
producen manchas en la piel, pigmentación o bronceado, activan el
desarrollo de arrugas y destruyen la producción de colágeno causando un
prematuro envejecimiento de la piel.
Los efectos de los rayos UVB y UVC en la piel
aceleran la producción de melanomas (principal causante de cáncer a la
piel), como también las causantes de quemaduras. En pocas palabras, la
más peligrosa.
Por tal motivo, nos preocupamos de la salud de nuestros lectores y recomendamos la siguiente información:
- Evitar la exposición solar en horas de mayor calor, entre las 12:00 y 16:00 horas.
- Utilizar bloqueadores solares que protejan de los rayos UVA y UVB sin importar edad, sexo o tipo de piel.
- Untar la solución protectora por lo menos media hora antes de exponerse al Sol y repetir el proceso cada dos horas.
- Cada mil metros de altura sobre el nivel del mar, el efecto de los rayos solares aumenta un 12%, no existe protección diseñada para la altitud, por lo cual la exposición solar debe ser menor respecto a altitudes cercanas al nivel del mar.
- Comprar bloqueadores solares por lo menos unos 3 meses antes del inicio del verano.
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